Rehabilitar significa recuperar la función o actividad que se ha perdido. Es un trabajo satisfactorio ya que un lugar abandonado o en mal estado recuperará su brillo y la vida que tenía. Porque rehabilitar es también un impulso al desarrollo. Como en este caso que os contamos.
Se trata de la rehabilitación de las antiguas piscinas de La Peña Estación, una población de la comarca de La Hoya de Huesca, que estaban en estado de semiabandono desde hacía años.
Estas piscinas llevaban mucho tiempo sin utilizarse y ello hizo que los elementos se deterioraran y la maleza invadiera el espacio, haciendo de él un “no lugar”. El Ayuntamiento ha querido devolverle la vida a este lugar para que sus habitantes puedan disfrutar de las instalaciones y también para que se convierta en un atractivo para quienes no viven allí.
Para ello, el proyecto consistía en rehabilitar el espacio y convertirlo en un complejo con piscina, aseos y una zona de bar.
Una de las diferencias entre construir y rehabilitar es el aprovechamientos de las infraestructuras existentes y por eso hemos mantenido el vaso de la piscina antigua y una parte del edificio donde estaban los antiguos lavaderos. Pero, antes de empezar hubo que desbrozar el solar para retirar la maleza pero manteniendo el arbolado que dotará de sombra las instalaciones.
Todo lo demás; playas, accesos, instalaciones y los dos aseos que había en la instalación original se demolieron.
Aprovechamos la edificación del lavadero, ampliándola, para alojar allí tres aseos, uno de ellos accesible. También está equipada con duchas, lavabos, inodoros, un espacio para botiquín y camilla para primeros auxilios, un almacén y una zona de bar abierta a la piscina.
El vaso de la piscina lo hemos adaptado a las nuevas normativas de accesibilidad y seguridad y se ha cambiado por completo el sistema de depuración. La impermeabilización de la piscina se ha realizado con Liner de alta calidad que además, tiene un tacto mucho más agradable que otros materiales.
La playa de la piscina se ha ejecutado con hormigón en la que una parte se ha embaldosado y otra se ha instalado césped artificial para que sea más confortable, pero minimizando los gastos de mantenimiento y riego.
En la zona de acceso al recinto se ha mejorado el pavimento, así como la accesibilidad a personas de movilidad reducida.
Una rehabilitación completa, que como podemos comprobar en las fotografías, parece que sea un lugar completamente nuevo. El cambio es impresionante y nos sentimos muy orgullosos de haber contribuido a que en La Peña Estación puedan disfrutar de un lugar tan agradable que se volverá a llenar de alegría, risas y recuerdos.
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