¿Sabes que gran parte de las emisiones de Co2 de las ciudades es responsabilidad de las edificaciones? ¿Y que la mayoría de edificaciones de nuestro país tienen materiales contaminados por amianto que además de insalubre es dañino para el medio ambiente? Puedes hacer que tu edificio sea más sostenible y además de cuidar el planeta, ganarás en confort y en ahorro.
Nuestros edificios producen gran cantidad de emisiones que dañan el medio ambiente y consumimos gran cantidad de recursos energéticos para regularlos térmicamente. Además, gran parte de las edificaciones en nuestro país, tienen materiales contaminados por amianto, material insalubre además de dañino para el planeta. Revertir esta situación está en tu mano. Puedes hacer que tu edificio sea más sostenible y con ello, ganar muchísimo. ¿Quieres saber cómo? Te lo explicamos.
Impermeabiliza correctamente: una correcta impermeabilización evita filtraciones y desperfectos lo que hace que el ambiente dentro de los edificios sea más saludable, además de garantizar un confort térmico más eficiente. Sin humedades que además de afectar a la estructura provocan malos olores y obligan a consumir más calefacción en invierno.
Aislamiento, aislamiento, aislamiento… no podemos dejar de decir que el aislamiento es la base de un menor consumo de energía. Una vivienda o edificación bien aislada mantiene mejor la temperatura y no necesita tanta calefacción o aire acondicionado. Te sorprendería saber cuánto puedes ahorrar.
Entre todos mucho mejor, Sistema SATE. El sistema SATE permite mejorara la envoltura de un edificio entero, no solo de una vivienda individual, lo que redunda en una mejor térmica en su interior y una reducción de la contaminación acústica. Da igual la fecha de construcción de tu edificio, hay soluciones dentro del sistema SATE para cada uno.
Un edificio saludable es un edificio sin amianto. El amianto está presente en la mayoría de los edificios de nuestro país. Se trata de un material altamente nocivo, responsable directo de enfermedades mortales, que se ha utilizado hasta 2004 en multitud de materiales constructivos. Si estos materiales contaminados están en mal estado suponen un riesgo muy importante para la salud de las personas. Por eso es muy importante su eliminación en condiciones, realizada por profesionales autorizados.
Estos sencillos pasos ayudan a que nuestro edificio sea más sostenible ya que la conservación es mejor, se reducen los consumos de calefacción y refrigeración y se evita que materiales peligrosos como el amianto lleguen al aire que respiramos. Pero no solo eso, también evitan reformas, nos permiten ahorrar mucho dinero en las facturas de luz y gas, hacen que ganemos en confort acústico, que protejamos nuestra salud y revalorizan el inmueble.
¿Aún tienes que pensar si mejorar tu edificio y hacerlo más sostenible? Si tienes dudas, puedes contactar con A&G y resolveremos todas tus dudas.
