Un problema oculto: tuberías de plomo y pinturas con plomo

En muchas viviendas construidas hasta 1978 hay tuberías de plomo o superficies pintadas con pintura que contiene este tóxico. Se trata de un metal que, aunque se usó ampliamente durante décadas, es perjudicial para la salud y debe de ser eliminado con seguridad. Te explicamos más sobre el plomo y sus peligros, dónde suele encontrarse en los edificios y cómo puedes localizarlo.

 

¿Qué es el plomo?

El plomo es un metal pobre que se encuentra de manera natural en la corteza terrestre. Debido a sus propiedades se utilizó durante miles de años para fabricar utensilios de menaje y en la canalización de las aguas. Durante la revolución industrial pasó a utilizarse de manera masiva en la industria y en la construcción.

Debido a sus propiedades, como su resistencia a la corrosión por agua, se utilizó para la fabricación de tuberías y se fabricaron  pinturas con base de plomo debido a que este metal ayudaba a que el color se fijara y las hacía más resistentes.

¿Cuál es el peligro del plomo?

Las partículas de plomo que se desprenden de las tuberías y de otros objetos que lo llevan en su composición contaminan el agua que bebemos o quedan en suspensión en el aire que respiramos y se van acumulando en nuestro organismo.

Al respirarlos o beberlos se acumulan en el organismo durante años.

Altos niveles de plomo en el organismo puede provocar daños graves en los riñones, el cerebro, el sistema nervioso o enfermedades muy específicas como el saturnismo o envenenamiento por plomo que provoca alteraciones psicológicas graves en quien lo padece.

Así, la intoxicación por plomo es muy perjudicial para la salud y afecta especialmente a los niños pequeños y a las mujeres embarazadas,causando problemas de desarrollo e incluso problemas de desarrollo.

Los peligros de la exposición al plomo, hizo que el uso de plomo en diferentes elementos se fuera prohibiendo. Así, el uso de pinturas con plomo está prohibido en España desde 1988 y en las tuberías desde 1975.

Sin embargo, en el caso de la pintura, pese a la prohibición e incluso a los decretos firmados mucho años antes, se siguió comercializando este tipo de pintura hasta 1993.

Esto significa que es más que probable que en tu edificio o vivienda pueda haber materiales contaminados por plomo. En el caso de las tuberías, si el edificio fue construido antes de 1975 es casi seguro, salvo que se hayan sustituido.

En el caso de los radiadores de hierro era común recubrirlos con pintura con plomo (minio gris) aunque luego se pintaran de otros colores por encima.

En el caso de la pintura todavía es más probable, ya que se utilizaba de forma habitual para pintar radiadores (el caso de minio gris) o barandillas metálicas (minio naranja para la corrosión)

 

¿Es obligatorio cambiar las tuberías de plomo?

 

En caso de reforma si. Deben ser sustituidas por otras fabricadas con materiales permitidos.

Si no hay reformas, deben sustituirse cuando hayan llegado al final de su vida útil, que está entre 15 y 20 año y sobre todo depende de la concentración de plomo que tenga el agua potable de nuestro edificio.

La normativa establece un máximo de máxima de 10 microgramos por litro y debido a que el plomo está presente de forma inorgánica, si nuestra tuberías son de plomo, lo más probable es que se sobrepase esta cantidad.

No hay exposición segura al plomo y por eso, debemos tomarnos muy en serio la posibilidad de que en nuestra vivienda haya este tipo de tuberías.

 

¿Y qué pasa con las pinturas con plomo?

En el caso de las pinturas, también es bastante probable que haya elementos contaminados por plomo en cualquier edificación anterior a los 90. En ese caso, lo primero que debemos comprobar es que esté en buenas condiciones.

En cualquier caso, aunque lo esté, recomendamos la eliminación completa y segura de estos materiales, especialmente en el caso de que haya niños que puedan ingerirlo por contacto.

 

¿Cómo puedo saber si en mi casa tengo plomo?

Lo más adecuado es realizar un diagnóstico previo que pueda localizarlo con exactitud, bien sea en las tuberías de agua o en cualquier otro elemento revestido con pintura que contiene plomo.

Este diagnóstico solo puede realizarlo un profesional especializado que señalará los puntos afectados, su estado e incluso la calidad del agua de consumo humano. Desde A&G ofrecemos este servicio de diagnóstico del plomo en edificaciones. Nuestro trabajo viene avalado por nuestra impecable trayectoria en la gestión del amianto y nuestra experta, Lorena Orduna, está perfectamente formada para localizar y diagnosticar con precisión y seguridad.

Si quieres sabe si hay plomo en tu edificación o si necesitas más información sobre este servicio, ponte en contacto con nosotros sin compromiso en info@arizonygracia.com