Como anunciamos, el pasado domingo 28 de febrero se emitió en la Sexta el programa Salvados dedicado al amianto. Lo estuvimos viendo con mucho interés y nos gustaría destacar y comentar algunas cosas.
Aunque entendemos la vertiente humana de la problemática del amianto (miles de trabajadores y sus familias afectados por su incorrecta manipulación que sufren consecuencias gravísimas para su salud) , y el programa nos pareció correcto y divulgativo en contenidos. Hubiéramos deseado una temática más actual acerca del amianto, es decir, que el programa explicara que el amianto está en muchos más lugares de los que pensamos. En efecto, como solución constructiva el fibrocemento está en tuberías, aislantes, fachadas… Prácticamente en cualquier construcción hecha antes de 2001. Incluso en partes de las construcciones que ni sospecharíamos como tejas o depósitos de agua. Por eso, las catas y los análisis son tan importantes.
Aunque no está demostrado el peligro que supone para la salud la «convivencia» continuada con este material, más allá de su incorrecta manipulación, si hay fundadas sospechas sobre esta peligrosidad. Y aunque no se deber provocar alarmismo social al respecto, pensamos que se debería haber informado más sobre esto.
Tampoco se explicó que el amianto no se puede retirar como cualquier otro material, que lo ha de hacer una empresa especializada, con los correctos equipos de seguridad como los de nuestra empresa. Aunque es de agradecer que las primeras imágenes del programa fueran las de una unidad de descontaminación, hay que explicar que no es que no se deba hacer de otra manera, es que está prohibido.
También pensamos que todos los interesados deberían saber que en cualquier obra de rehabilitación o derribo, una partida del proyecto elaborado por la Dirección Facultativa tiene que contemplar la retirada del amianto por parte de una empresa especializada y autorizada.
Los peligros colectivos de la manipulación del fibrocemento son tan evidentes que retirarlo no debe ser nunca «una ampliación de presupuesto» si no que deben estar contemplados desde el principio.
Por último enviamos todo nuestro apoyo y consideración a las víctimas del amianto.
