Estamos en plena temporada de piscina y la verdad es un placer poder refrescarse para combatir las altas temperaturas que tenemos en este principio de verano. Además una piscina se convierte en el centro neurálgico de nuestro hogar durante la temporada, siendo el lugar ideal en el que reunirnos en familia o amigos. En Arizon&Gracia nos gusta aconsejaros sobre los mejores cuidados para que la disfrutéis siempre en óptimas condiciones. El año pasado os hablamos de los cuidados y el mantenimiento en estos posts y os invitamos a que volváis a consultarlos. Este año además, queremos hablaros de un accesorio de piscina que es muy útil y quizás no muy conocido: los cobertores de verano.
En nuestros consejos para hacer un buen invernaje, os recomendamos el uso de una buena cubierta para la piscina con el objeto de protegerla y también como medida de seguridad. Los cobertores de verano son diferentes y cumplen funciones distintas.
Los cobertores de verano tienen dos caras: una parte lisa que va hacia fuera hecha con loneta de rafia y otra cara formada por burbujas de polietileno de 400 micras que es la que se coloca sobre el agua. Se colocan flotando, así que a diferencia de los de invierno no sirven como medida de seguridad para evitar caídas indeseadas ni soportan el peso de una persona. Hay que tener en cuenta que este tipo de cobertores están concebidos para ponerlos y quitarlos a diario si es necesario, por eso también son tan ligeros, ya que pesan sobre 540gr por m2 de superficie.
Un cobertor de verano tiene una doble función, por un lado, evita parte de la evaporación nocturna del agua debido al calor y en aquellos lugares donde el contraste entre la temperatura nocturna y diurna es extremo aun en verano, como por ejemplo el pirineo oscense, ayuda a retener la temperatura que ha adquirido el agua tras un día de exposición al sol. De esta manera evitamos esa sensación tan familiar pero desagradable en la que tenemos calor pero el agua de nuestra piscina está demasiado fría como para disfrutarla.
Los cobertores de verano, además, reducen el trabajo de nuestra depuradora ya que mientras está cubierta se evita que puedan llegar hojas o suciedad al agua y el agua se mantiene más pura. Lo que también se traduce en un menor gasto de productos de mantenimiento.
También, en el caso de que vayamos a estar unos días sin utilizarla, nos permite protegerla de los rayos solares, ya que estos cobertores evitan que pase gran parte de estos, evitando que puedan proliferar algas y otros microorganismos y que se evapore parte del agua.
Es posible que aunque valores los beneficios de utilizar un cobertor de verano, te parezca cansado enrollar cada día el cobertor cuando empiezes a usar la piscina y volver a colocarlo nuevamente al atardecer. No debes preocuparte, ya que en Arizón&Gracia suministramos también enrolladores para cobertores, manuales o automáticos, que harán la tarea mucho más fácil y cómoda.
Podemos adaptar nuestros cobertores a la forma y dimensión de tu piscina y en el caso de piscinas de gran formato, como las piscinas de uso público, también podemos colocar enrolladores motorizados de doble pie que resisten esas dimensiones.
Si te has decidido a cuidar mejor tu piscina y a evitar la sensación de agua helada tras la noche, contacta con Arizón&Gracia dónde te informaremos sin compromiso y dónde te daremos un asesoramiento profesional sobre la solución ideal para cubrir tu piscina este verano.