En 2010 se detectaron fugas de agua en la presa de la Estanca de Alcañiz, que es un embalse en derivación del rio Guadalope catalogado de interés natural para aves acuáticas, por estar incluido en la lista de Zonas Húmedas de Importancia Regional elaborada por la SEO (1987). Esta infraestructura presentaba al menos tres filtraciones, también llamadas sifonamientos. Estas fugas, impedían que se retuviera el agua necesaria en la parte superior del río y además de afectar al aspecto del cauce la vegetación del entorno y los campos de cultivo sufrían por la falta de agua. Además del grave problema de carácter ecológico y económico, la infraestructura se degradaba cada día haciendo cada vez más difícil su mantenimiento.
El Ayuntamiento de Alcañíz, propietario de la infraestructura, y la Confederación Hidrográfica del Ebro decidieron que la reparación tenía que ser definitiva, puesto que anteriormente se habían solucionado fugas de manera provisional y los resultados no habían sido satisfactorios. Para intentar solucionar los problemas de sifonamiento, los ingenieros plantearon crear una especie de by-pass por un canal que discurre paralelo al cauce por el que desviar las aguas del Guadalupe.
Previamente habría que crear una barrera o azud aguas arriba de la actual presa con material suelto como arcillas o gravas. También se estudia colocar un sistema de bombeo entre esta nueva presa temporal y el pie del azud para que los obreros pudieran trabajar en seco y de esta forma poder rellenar las fugas con hormigón armado.
Finalmente, los trabajos se iniciaron en 2015. Era una actuación complicada ya que como hemos dicho, el resultado tenía que ser definitivo. Por eso, el Ayuntamiento y la CHE quisieron contar con los mejores profesionales en este tipo de intervenciones. Arizón & Gracia fue la empresa encargada de la impermeabilización de los muros, y para ello utilizamos lámina de PVC Flagon CSL de 1,5 mm de espesor sin arma; el material más indicado para garantizar un acabado perfecto. Desde entonces, diciembre de 2015, la presa ha funcionado en perfectas condiciones, acabando con los problemas que arrastraba desde hacía años.
Una vez más, Arizón & Gracia ha sabido estar a la altura de las mayores exigencias técnicas, demostrando que la confianza que ponen en nosotros nuestros clientes es merecida. Día tras día trabajamos duro para seguir sintiéndonos orgullosos de nuestro trabajo.