Estamos sufriendo la segunda ola de calor y sólo estamos en junio. Las temperaturas en Aragón sobrepasan los 35 grados y una de las mejores formas de combatirlas, además del aire acondicionado, es disfrutar de las piscinas. Y si además la tienes en tu propia casa muchísimo mejor.
El problema es cuando la piscina tiene un problema en el que no hemos reparado durante el año. Aunque sea nueva y esté en buen estado, puede ser que presente fugas, por ejemplo. Y cuando lo descubrimos, cuando nos damos cuenta que no es normal la bajada del nivel del agua, es justamente cuando más necesitamos usarla.
En esos momento es normal que pensemos que «se nos ha arruinado» la temporada de piscina. Sin embargo, no tiene porqué ser así.
En Arizón&Gracia podemos ayudarte, porque además de construir piscinas, también efectuamos trabajos de rehabilitación, efectivos, seguros y que conllevan menos tiempo de obra que los tradicionales.
Os vamos a poner un ejemplo, en este caso, nuestro cliente detectó una serie de problemas en su piscina. Nos llamó y nos planteó su problema. Nuestro equipo se trasladó in situ y realizó un diagnóstico de la situación. Nos dimos cuenta que con una rehabilitación del vaso no solo se solucionaría el problema, sino que además tendría una piscina mucho más atractiva y nueva.
Utilizamos nuestro expertise en la impermeabilización con láminas de PVC asegurar la correcta impermeabilización del vaso. Nuestras intervenciones se realizan con los mejores materiales y nuestros equipos los colocan a la perfección.
De entre la amplia gama de colores de nuestras láminas de PVC, el cliente eligió una que lleva una serigrafía imitando el gresite, lo que le da el espectacular efecto del mismo, pero con un tacto mucho más agradable.
Para completar la intervención, sustituímos la piedra de coronación por una de un bonito color blanco que aportaba al conjunto una gran luminosidad y le da un aspecto totalmente nuevo.
Nuestra intervención resultó un éxito y en menos tiempo del que el cliente imaginaba tuvo su piscina lista para el baño. ¡El verano se había salvado!
